Hoy os traigo otra de mis últimas compras, esta también muy satisfactoria (por desgracia no todas lo han sido… ya os iré enseñando las troladas también). Compré este limpiador impulsada por el buen nombre de la marca, ya que pocos reviews he encontrado en internet sobre él.

Poco hay que decir bajo mi punto de vista sobre un limpia brochas, así que intentaré no enrollarme demasiado.

Uso: Limpiar las brochas y pinceles desprendiendo así los restos de color que hayan quedado en ellas y desinfectar levemente. Es decir para el uso personal de brochas y pinceles, os vale para no tener que lavarlas con agua y jabón después de cada uso. Y para un uso profesional, vale para poder volver a usar dicha brocha con otro producto en la persona que estáis maquillando y a unas malas incluso en otra persona.

Review: Este es sin duda mi favorito de todos los que he usado, que tampoco han sido muchos, la verdad. He usado el de KIKO, el de M.A.C y ahora este. ¿Por qué le da patadas a los otros dos? Por lo siguiente.

El de KIKO para mí no vale para nada. Me parece muy caro para lo que es (5,90 €/50 ml), te empapa la brocha y tarda muchísimo en secar por lo que no sirve para ese mismo maquillaje, si acaso para el de horas después. Ya que yo lavo las brochas de otra manera, este producto es inútil para mi. Y es que encima tengo que usar muchísimo para poder dejar el pincel limpio. 

El de M.A.C no es que sea malo, es muy pero que muy bueno, pero también es más caro que este (12,50 €/ 235 ml), y el trabajo lo hace igual. Incluso no recuerdo si mojaba la brocha tan poco como lo hace el de Japonesque… No tiene ese toque aceitoso que tanto me ha gustado del de Japonesque aunque sí creo que desinfecta mucho más la brocha, pero esto es percepción mía. No me he puesto a analizar los componentes. Además el de M.A.C tiene un envase sin spray por lo que o vas traspasándolo a un spray cualquiera o te arriesgas a desperdiciar producto.

El de Japonesque es genial por varios motivos:

• Limpia las brochas en segundos y solo necesita un par o tres «sprays».
• Su composición es aceitosa en lugar de acuosa por lo que no moja la brocha y la deja lista para ser usada de nuevo en minutos. (Lo que sí mancha un poco los dedos y el mango de la brocha, pero el aceite desaparece pasándole el mismo papel que usáis para frotar.
• El producto viene en 3 tamaños diferentes, uno de 30ml ($5), otro de 128ml ($10) y el más grande de 473ml ($23,5),. Los dos primeros tienen formato spray y el último como el de M.A.C, tapón de rosca y a volar. Y la relación calidad precio es genial.
• Su olor es a limón pero no de mala manera (como los lipglosses redondos de NYX… puaj) huele a limón pero de una manera mas… pastel de limón que no limpia platos cítrico.
• El diseño del envase (que como sabrán quienes me siguen es algo que me llama mucho) es precioso y muy limpio y minimalista, sin colores raros en el líquido en sí ni etiquetas horteras.

Yo compré el tamaño grande y el mediano en Cherryculture. Uno para usar en mi kit profesional y en mis propias brochas y el otro para ir rellenando el primero. Pero tuve la suerte/casualidad/coincidencia, que en un pedido a parte que hice a la misma tienda me regalaron el pequeño, así que he acabado teniendo los 3.

Desde luego os recomiendo esto como lo que más. No penséis que es solo para gente profesional… las brochas las tiene que limpiar todo el mundo y esto hará que las que solo os maquilléis a vosotras mismas no tengáis que estar mojándolas y secándolas después de cada uso.

Espero que os sea tan útil como a mi!